25/09/2020 –
4ta revolución industrial: productividad a través de centros integrados de operaciones
A lo largo de la historia las diferentes industrias que representan a los sectores de la economía han tenido que evolucionar para asegurar su supervivencia. Con el pasar de los siglos nuevas tecnologías se han desarrollado, generando cambios en las actividades industriales de cada época. Desde el siglo XVIII con la llegada del vapor y la 1ra Revolución Industrial, pasando por el siglo XIX con la electricidad anunciando la 2da Revolución Industrial, incluido el arribo de las computadoras, que provocaron la 3ra Revolución Industrial hasta la, hoy denominada, 4ta Revolución Industrial, liderada por los avances en inteligencia artificial, las industrias han sabido no solo adaptarse sino utilizar estos nuevos avances para destacar en sus respectivos mercados competitivos.
Elaboración propia
Así lo confirma un artículo publicado por la Cámara Minera del Perú, que afirma que el empleo de inteligencia digital en las operaciones y procesos, la utilización de analítica obtenida de datos para optimizar las decisiones administrativas y gerenciales, el uso de la robótica para disminuir accidentes y explorar en los yacimientos, son algunas de las prácticas que, gracias a esta última revolución industrial, se han ido incorporando la minería. Otro beneficio de la aplicación de estos sistemas es que permiten mantener las actividades en una mina ante contingencias como la vivida por el COVID-19, según la revista especializada, Minería y Energía. A través del soporte y asistencia de instrumentos digitales, se puede mantener la disponibilidad de los equipos hasta en un 98%.
A nivel internacional, Australia es uno de los países que se encuentra a la vanguardia en tópicos relacionados a la digitalización en la industria minera. El mejor ejemplo de las facilidades de esta digitalización son los centros integrados de operación remota CIO o IROC, donde “desde el control de perforación hasta el envío de camiones en un pozo, se puede monitorear y controlar a miles de kilómetros de distancia de donde se encuentran los activos físicos”, comenta la revista especializada en minería, Australian Mining. En lo que respecta a Latinoamérica y el Caribe, Brasil, México, Perú y Chile concentran más del 85% de las exportaciones de cobre, siendo las dos últimas las más grandes potencias en el mundo. En esta perspectiva, el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP) afirma que en Chile este proceso ya se encuentra vigente, mientras que Perú está dando sus primeros pasos.
Los especialistas chilenos Emilio De Giacomo y Gustavo Sánchez en su artículo académico “Centros Integrados de Operaciones, cómo optimizar sus beneficios” hacen mención a tres dimensiones que debe tener el diseño de un Centro Integrado de Operaciones, CIO. La primera de ellas, la operativa, comprende todas las plataformas y herramientas de tecnología para ejercitar los modelos de producción de manera remota con resultados a corto plazo. Entre ellas, el telecomando de equipos, los riesgos operacionales, la automatización de sistemas y el monitoreo. Otro aspecto vital en un CIO es el táctico, utilizar dichas herramientas, prácticas y sistemas para gestionar las operaciones del negocio esperando resultados óptimos en un corto y mediano plazo. La última dimensión a tomar en cuenta es la estratégica. Esta consiste en utilizar todas las plataformas y prácticas para proyectar estratégicamente el negocio con una visión a mediano y largo plazo.
El concepto de CIO resuena en Chile desde el año 2006, en el que Coldelco incorporó la idea de las operaciones a distancia y, actualmente, se encuentran disponibles en más de un yacimiento minero. El diario chileno, El Rancagüino afirma en un artículo que en la mina El Teniente desde el 2018 más del 90% de la producción de la totalidad de los procesos esenciales de la mina subterránea se operan desde el CIO, que se ubica a en Rancagua, a 50 km de distancia. Entre ellas las minas Diablo Regimiento y Esmeralda. Verónica Finchera, gerente del Consejo de Competencias Mineras (CCM), comenta que estas tecnologías 4.0 están ampliando el panorama minero a otra fase en la que las operaciones remotas incrementan la efectividad de los procesos de perforación, transporte y fundición.
Por otro lado, en Perú la minera Antamina, frente a las medidas de distanciamiento social que se impusieron por la pandemia, dio un gran paso e implementó el sistema de Dispatch para que sus trabajadores laboren desde sus hogares. El Gerente de Sistemas, Telecomunicaciones y Control de Procesos de Antamina señala que, si bien la empresa siempre ha tenido presente a la innovación como parte de su propuesta y han configurado anteriormente otro tipo de opciones para realizar trabajo remoto, esta es la primera vez que se instauran soluciones de carácter integral para operar a distancia, desde casa. El portal de prensa y noticias, Press Perú, asegura que esta empresa minera ha logrado que sus ingenieros puedan trabajar desde sus domicilios, mediante la supervisión de los procesos de despacho de las operaciones en el yacimiento, a esto se le llama Dispatch. Lo que quiere decir, que desde sus casas administran todos los equipos de carga, acarreo y los auxiliares, que se encuentran a más de 400 km de distancia y a 4,200 m.s.n.m.